sábado, 23 de marzo de 2019

Casas sismorresistentes: ante un gran terremoto al acecho

Casas sismorresistentes: ante un gran terremoto al acecho
Vivimos en la zona más sísmica del planeta, pero seguimos construyendo de espaldas a la amenaza.
Casa en zona de riesgo sismico, casa dos pisos derrumbandose, construye bien, maestro
A poco más de 50 km de profundidad, la colisión de las cuatro placas tectónicas, que a diario causan en promedio 40 sismos en territorio mexicano, generó el pasado 19 de septiembre el terremoto más importante de 2017. Pese a que el epicentro fue registrado en Puebla, por la naturaleza de su suelo (está asentada sobre el lecho de una laguna prehistórica) y su densidad demográfica, fue Ciudad de México la localidad más afectada. En la capital, al menos 44 edificios colapsaron durante el sismo y atraparon en sus escombros a cientos de personas. El USGS, servicio sismológico de los Estados Unidos, lo explica así: “En general, la población en esta región reside en estructuras que son una combinación de construcciones vulnerables y otras sismorresistentes. Los tipos de edificios vulnerables predominantes están hechos con bloques de adobe con vigas de hormigón y paredes de adobe”.
El escenario en nuestro país no es muy distinto: de acuerdo con Felipe García Bedoya, director del Instituto Capeco, hay un 60% de construcciones informales tan solo en Lima y, a pesar de que no hay estudios a nivel nacional, se estima que en provincias la proporción de estas viviendas es aún mayor, pues fuera de las capitales de provincias hay poco control.
“El desastre de una ciudad a raíz de un sismo no depende de su intensidad, sino de la manera en que sus construcciones respondan a las vibraciones del suelo”, explica Hernando Tavera, presidente ejecutivo del Instituto Geofísico del Perú (IGP). Así, no solo urge rescatar lecciones aprendidas en México o en nuestro altamente sísmico vecino, Chile: también es necesario abrazar las normas de construcción que nos garanticen una vivienda sismorresistente.
Casa en zona de riesgo sismico, libreta en 2d, reglamento nacional edificaciones, construye bien, maestro
Como punto de partida, podemos tomar la normatividad técnica del Reglamento Nacional de Construcciones, que indica que para cada tipo de construcción —como casas, edificios, centros educativos o de salud— existe una normatividad determinada y especificaciones técnicas que deben ser consideradas para que las estructuras soporten de la mejor manera un sismo.
Casa en zona de riesgo sismico, pareja de ingenieros y arquitectos, construye bien, maestro
Naturalmente, esta reglamentación debe ser respetada y concretada bajo la batuta de profesionales en construcción, como ingenieros civiles y arquitectos.
El ingeniero se abocará al diseño estructural de la vivienda, mientras que el arquitecto debe hacer lo propio con la disposición de los ambientes. “En la etapa de cálculo estructural, los profesionales evaluarán cuál debe ser el diseño de una vivienda de acuerdo con proyecciones en todos los escenarios de ondas sísmicas que sacudan al inmueble en diferentes direcciones, a fin de lograr un diseño lo más seguro posible”, señala García Bedoya.
La dirección de las ondas va a depender del tipo de sismo, no hay recetas fijas para superarlas; sin embargo, el tipo de suelo sí permite vislumbrar cómo se comportará una construcción sometida a determinadas ondas.
La calidad del suelo, por ejemplo, es la que determinará si es necesario construir una platea de cimentación, el tipo de estructura sobre la que se levantará la vivienda. Pese a ser una pieza vital para resistir un terremoto, en muchas laderas de cerros la construcción informal da pie a la aparición de casas asentadas sobre pircas o muros de rocas o llantas. “Durante un sismo, es la platea de cimentación lo que va a determinar que el hundimiento del inmueble sea mínimo. La norma técnica nos permite saber el ancho y la profundidad de la cimentación y hasta el tipo de ladrillo necesario para cada edificación, de acuerdo con el suelo sobre el que se erige”, precisa el jefe del Indeci, general Jorge Chávez.
Lima tiene una amplia diversidad en cuanto a calidad de suelos y conocer la superficie sobre la que vamos a construir es vital para hacerlo bien. Pero no es lo único a tomar en cuenta. Incluso una vivienda de material noble que no haya sido debidamente erigida será severamente dañada, mientras que una de adobe que utilice nuevas técnicas de reforzamiento —como geomallas— podrá soportar mejor sismos severos, sin colapsar.
Casa en zona de riesgo sismico, consideraciones previas antes de una construccion, construye bien, maestro
Si bien la principal cons ideración es la ubicación de la vivienda —fuera de zonas vulnerables, que puedan soportar inundaciones, deslizamiento de tierra, huaicos, etcétera—, se debe evaluar el tipo de suelo para hacer el diseño de la cimentación y estructura de la vivienda.
Daño sísmico sufrido por viviendas en el Perú y el mundo
El correcto procedimiento constructivo es hacer bien las mezclas de materiales, asentar debidamente los ladrillos, vaciar adecuadamente el concreto y colocar apropiadamente el acero que brindará flexibilidad a columnas y vigas. Confiar este aspecto a empíricos de la construcción no solo significa arriesgar la inversión de toda una vida en la edificación de la vivienda, sino también arriesgar la vida.
Casa en zona de riesgo sismico, mapa de peru zona de alto riesgo en caso de sismo, construye bien, maestro
Indeci ha identificado tres puntos en nuestra costa que podrían sufrir las consecuencias más severas del próximo gran terremoto en suelo peruano. Uno de ellos, entre Moquegua y Tacna, afectado por una falla en el norte chileno; otro, entre Ica y Arequipa, expuesto como todo el litoral peruano a la fricción de las placas de Nasca y Continental (sobre la que se asienta nuestro país); y el tercero, frente a Lima, cuyo efecto podría repercutir en Áncash. De hecho, los estudios de riesgo sísmico proponen a nuestra capital como el epicentro del próximo gran terremoto peruano.
Los expertos consultados coinciden en señalar que viviendas en suelos arenosos como los de Villa El Salvador y en cerros como el San Cristóbal deben tener un muro de contención al inicio de su perfil para garantizar la estabilidad. Asimismo, en su armado se debe evitar el uso de maderas y llantas y optar más bien por el concreto.
Construir sobre un lecho de roca como el de algunos cerros puede ser seguro, aunque sin una debida cimentación ni columnas la casa va a caer, producto de una falta de flexibilidad ante el sismo. Si la vivienda está hecha de madera, es necesario aumentar la cantidad de vigas y columnas para reforzar su estructura. Si está hecha de ladrillo, se tiene que formar uniones que den un mayor sustento a la vivienda. Actualmente, en Lima se vienen empleando juntas de dilatación —piezas estructurales creadas para resistir el estiramiento o la contracción de los materiales de construcción—, en las cuales se colocan planchas de tecnopor de 5 o 6 cm de espesor para hacer más sismorresistente a la estructura.
Casa en zona de riesgo sismico, aisladores sismicos, construye bien, maestro
Asimismo, cada vez más proyectos inmobiliarios multifamiliares y edificios de oficinas están apostando por la instalación de aisladores (grandes estructuras en los cimientos que absorben como resortes la energía del sismo) o dispersores (que facilitan la difusión del movimiento para reducir su efecto en las estructuras). No obstante, el cambio es aún lento. La Universidad Nacional de Ingeniería ha identificado en un estudio más de un millón y medio de viviendas mal construidas con riesgo de colapsar y que requieren reforzamiento inmediato en Lima.
Aún nos resta aprender y tomar rutas trazadas ya por otros países.

No hay comentarios:

Publicar un comentario